Una mujer cambio mi vida

En la calle me crié
y ella fue mi maestra.
Hoy estoy educado
en el odio y la violencia.

Todos los días me pasa
por mi confusa cabeza,
delinquir sin miramiento
aunque termine en la trena.

¡Qué pena!

No sé reprimir mis impulsos
ni tampoco mi ira y mi maldad.
Cualquier día cometo un crimen
y en la cárcel me van a encerrar.

¡Ahí no quiero estar!

Una noche conocí a una chica
que su situación estaba igual.
Nos gustamos sin quererlo, 
y decidimos irnos a enmendar.

Sin saber, conocimos otra vida
y todo nos cambio por nuestro azar.
Dejamos las drogas y el robar,
nos dedicamos a nuestro amar.

El cariño que siento por esta mujer
ha hecho que me retire del mal.
Gracias a su ternura y sentimiento,
ahora soy una persona honrada y cabal.

Se olvidaron las delincuencias del pasado,
que en nuestra barriada nos distinguió.
Hoy somos dos personas respetadas, 
que la felicidad y el amor nos salvó.