Entre lágrimas me encuentro por no ser correspondido. Hice todo lo posible por amarte, pero fue inútil mi sentimiento pues tú, tenías decidido no aceptar el ofrecimiento.
Tengo fuerzas para hacerlo, quiero darte la justificación por mi ausencia y también por mis silencios. Estoy curando las heridas sufridas, por la frustración, el sufrimiento y los sentimientos. Ahora estoy mal y sin remedio.
Amor, eres una mujer increíble, te lo he recalcado muchas veces, sana, buena, excelente, bondadosa, digna de encontrar un hombre que te quiera, te haga feliz y sea tu pareja. No lo pude conseguir, aunque en algún momento me lo creyera.
Tus atenciones siempre fueron de mucho afecto como amiga. No comprendo la amistad entre un hombre y una mujer. Me cuesta disociar dónde termina ser amiga y empieza ser pareja, si no es, porque en está se comparte la sexualidad de ambos. Cada día, veía como me supuraba la herida que me producías en mis deseos.
Te decía que te quería y tú no respondías, sonreías y otro día sin confirmar la pregunta mía. Recuerdo la cara que ponías y consentías. Me sentí arropado en tus aprecios, percibí amistad de entretenimiento, advertí en tu mirada tus sueños.
Recibí gestos que me aproximaban a tus sentimientos, pero nunca me confirmaste, ¡Adelante con el cortejo!. Nos conocimos hace tiempo, pensaba que era el momento, para recibir una muestra de amor y sentimiento. Me estaba consumiendo en mi dolor, al no ver acercamiento. Quizá sea mi apreciación, no te comprendo.
Amor, no supe entender tu lenguaje corporal, tu forma de expresión, ni tus tiempos. Pero tienes que saber, que te quiero con todo mi cuerpo y me tienes que disculpar por hacerlo. Todos los días te recuerdo,todos los días te siento.
Te buscaré y saldré a tu encuentro, si tú decides declararme tu sentimiento. Ahora estoy triste y sin consuelo. Necesito que me digas lo que piensas de lo expuesto. Usa la sinceridad, la claridad y el deseo, pues quiero saber por dónde vas y determinar lo nuestro.
Comprenderé cualquier decisión, cualquier determinación que tú tomes, pero tienes que saber, que te quiero, que siento, sufro y me desespero. Nunca te quise declarar mis sentimientos más allá de lo hablado, pero tienes que perdonarme si consideras un atrevimiento lo declarado.
No quiero que pienses, que mi amor ha muerto. Tengo que saber a qué atenerme, porque te sigo queriendo. Nos prometimos ser sinceros. Ibas marcando los pasos, a lo largo de nuestro camino.
Te seguía en busca de tu amor imposible, una tarde de otoño, en una playa escondida. Cuando creí estar enamorado por las conversaciones tenidas, vino una ola maldita y borró las huellas de tu huida.
Te quise buscar para encontrarte, pero no fue posible hallarte. En mi, todo fue una ilusión desvanecida. Siempre que tú quieras,tendrás un buen amigo, que empezó a quererte y hoy está entristecido.
muy bonito, ojalá, fuese realidad y no ficción de autor
Me gustaMe gusta
Muy bonito, quería yo ser este amor…
Me gustaMe gusta
Hermoso poema.
Así pasa, hay ilusiónes no correspondidos.
Me gustaMe gusta